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Imagínese 40.000 años atrás, un gigante lago prehistórico se secó y creó dos desiertos de sal, el Salar de Coipasa y el de Uyuni; hoy muchos aventureros están asombrados por la belleza interminable de estas planicies blancas. El Salar de Uyuni se encuentra a una altitud de 3.650 metros en el altiplano boliviano, la extracción de sal sigue siendo una actividad crucial para muchos lugareños, especialmente en el pueblo de Colchani, sin embargo, los turistas vienen aquí para admirar el encanto inusual de un desierto blanco prístino, el cielo nocturno y los famosos Hoteles de Sal que se encuentran en los alrededores, estos exóticos hoteles se construyen en su mayoría a partir de la materia prima disponible en el lugar: sal; las paredes están hechas de bloques de sal, los muebles están tallados en sal, incluyendo las camas; el único rastro de materiales modernos se puede encontrar en los baños, el techo y, por supuesto, la iluminación.
Actividades: El Salar de Uyuni se convierte en un espectáculo fantástico el la época del año en que una fina capa de agua cubre los llanos y refleja el cielo (diciembre a marzo), se se puede permanecer en el "Espejo más Grande del Mundo". Especialmente la salida y la puesta del sol son los más fascinantes, experiencias únicas en el Salar de Uyuni. El desierto de sal no es precisamente un destino vacacional de lujo, aunque estos hoteles pueden aportar mucha comodidad y hacer de su viaje una experiencia única.
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