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Pese a que Uyuni es mundialmente conocido por su Salar, nosotros estamos en condiciones de afirmar que no es sólo el Salar. Dentro del circuito turístico también se pueden visitar desiertos, lagunas de colores, rocas volcánicas, hoteles de sal, vicuñas y flamencos, pequeñas comunidades y muchos colores; sobre todo: ¡naturaleza pura!.
Siempre buscamos recorrer y conocer todo lo que se puede, dentro del tiempo limitado que tenemos para cada uno de nuestros viajes, por eso buscamos y nos informamos bastante, ya que hay muchos operadores pero son muy pocos los habilitados y que cumplen con lo que prometen. Así llegamos a contratar el tour "Bolivia Trip", que inicia su recorrido todos días desde Uyuni, con 4 pasajeros, a diferencia del resto de los tours que vimos que salían con 6 pasajeros, deseabamos tener más comodidad dentro de la movilidad, que aún siendo una 4x4 nos pareció pequeña para un viaje tan largo entre 6 personas.
Otro punto importante por el que hemos escogido este tour, es que no necesitábamos bolsas de dormir porque íbamos a pasar la noche en los hoteles con baño privado y calefacción, los cuales están perfectamente preparados para soportar los -°20 que nos esperaban durante el viaje; este es un aspecto muy importante a tomar en cuenta, porque que el resto de los tours consideran el hospedaje en albergues básicos con baños y habitaciones compartidas y sin calefacción.
Llegó el día de nuestro viaje, serían tres días de recorrido a través del Salar de Uyuni, las Lagunas de Colores y los Desiertos de la región de Los Lípez, dentro de la Reserva de Fauna Andina Eduardo Abaroa.
Comenzamos el primer día apenas amanecido, nuestro conductor Raúl nos pasó a buscar con una 4x4 super equipada y acorde para la ocasión. Nuestra primera parada fue en el ingreso a la Reserva Eduardo Avaroa en el “Desierto de Dalí”, a una altura de 4750 msnm, comenzamos por impactarnos ante esta hermosa paleta de colores nos envolvió desde el principio. Disfrutando del paisaje del Desierto de los Lípez llegamos a las imponentes “Laguna Verde” y “Laguna Blanca”. Nuestros ojos no podían creer la majestuosidad del lugar.
La siguiente parada fue “El Sol de Mañana” aún subíamos más, estábamos a unos 4950 msnm, este lugar en donde está lleno de grietas por donde sale lava volcánica y diferentes gases sulfurosos. Y finalmente nos quedaba la más famosa e imponente de las lagunas, la “Laguna Colorada” sitio más importante de la región para la observación de flamencos de todas las especies. Con el poco aire que nos quedaba, recorrimos esta belleza de lugar activando todos nuestros sentidos para no perder nada de lo que nos estaba rodeando.
Antes de llegar al hotel paramos en el mítico “Árbol de Piedra”, tallado por el viento y la arena del lugar. Al anochecer, y sumamente agotados, nos hospedamos en el hermoso “Hotel Tayka del Desierto”.
El segundo día, después de desayunar en el hotel comenzamos el itinerario visitando las “Joyas Andinas”, las lagunas: Honda, Hedionda y Cañapa. Cada una ofrece un entorno increíble para observar la inmensidad de la naturaleza que las rodea, llenas aves silvestres y también algunos flamencos.
Dejando estas joyas detrás, con el “Volcán Ollague” que pudismo disfrutar desde un mirador, llegamos a un terreno similar a lo que nos imaginamos del planeta Marte. Llegamos a almorzar al Tayka de Piedra, hotel que está junto al “Pueblo Quemado de San Pedro de Quemes”. Apenas terminado el almuerzo y luego de haber descansado un poco fuimos a por lo que vinimos, ver el imponente Salar de Uyuni.
Una vez en el Salar, nos divertimos un rato en medio de la inmensidad blanca sin poder creer lo que estábamos viviendo y con la alegría de saber que al día siguiente íbamos a poder seguir disfrutándolo. Pasando por la “Isla del Pescado” arribamos rápidamente al último hotel que nos iba a albergar, el hermoso “Tayka de Sal”, llegamos al hotel para descansar un poco, pero sin perder más tiempo nos fuimos a ver el atardecer a un lugar que sólo Raúl, nuestro conductor, parece conocer, ya que estábamos completamente sólos contemplando la luna y el sol al mismo tiempo, con unos colores imposibles de describir con palabras.
El tercer y último día, comenzamos nuestro recorrido visitando la poblacion de Coquesa, donde se encuentran museos administrados por las comunidades locales: Museo de Coquesa y el Museo de Chantani, para observar fósiles, formaciones de rocas y como las atracciones más importantes cuentan con momias e instrumentos pre-colombinos.
Luego nos dirigimos hacia el Volcán Tunupa, llegamos hasta su primer mirador donde disfrutamos de una espectacular vista panorámica del Salar de Uyuni. Nos comentaron que es posible realizar una caminata de 8 horas, aproximadamente, para lograr llegar hasta el cráter del volcán Tunupa, realmente una experiencia única que esperamos poder realizar en nuestra próxima visita a Uyuni.
Más tarde debíamos cruzar todo el Salar de norte a sur, con distintas paradas en el medio. Una de las mismas es la increíble “Isla Incahuasi”, única en el mundo, en ella se encuentra gran cantidad de cactus gigantes que pueden llegar a medir más de 10 metros de altura y dentro de la Isla se puede realizar una corta caminata y llegar a la cima para admirar las maravillas que nos rodean. Desde esta cima, casi que se divisa el primer hotel de sal de todo el salar, lugar que se utilizaba como punto de partida del Rally Dakar, el cual está junto a una pequeña tarima de sal en donde todos los participantes dejan una bandera de su país.
Por último y para concluir nuestro día y nuestra visita hicimos una pasada por el “Cementerio de Trenes”, el mismo tiene máquinas y vagones de las primeras épocas de los ferrocarriles de procedencia inglesa y francesa.
Llegamos a Uyuni a las 5 de la tarde, justo a tiempo para organizarmos para nuestra siguiente aventura en estas hermosas tierras bolivianas.
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